Un pueblo entre Bastida y Castelnau
Todo empieza en la época romana
Saint-Félix-Lauragais tiene su origen en el establecimiento de un pequeño campamento romano en la loma llamada "de los 3 molinos". La colonia romana se instala en Saint-Julia. La población fue aumentando y el campamento se vuelve en Castrum visigótico. Los arqueólogos descubren sepulturas, hebillas de cinturón de bronce, frascos lacrimales....
En los alrededores del siglo X una Plaza señorial se instala con la construcción de un castillo, en la loma enfrente de la "de los Molinos". El señorío cuyo representante se llama Guillaume Jourdain (1035) es potente y sus voluntades indiscutibles en la comarca de Toulouse. Este castillo medieval lo hará derribar por completo Simón de Montfort durante la Cruzada de los Albigenses. En sus cenizas se edificará el castillo actual y se decidirá la creación de una ciudad nueva cerca del castillo.
El nacimiento de un "Castelnau-Bastide en una plaza señorial
¿Bastide o Castelnau? Mitad y mitad. Aquel pueblo queda levantado según las características de una "Bastide" (con una plaza central, un mercado cubierto, un campanario, calles de cuadros, murallas...) administrada por cónsules pero él que decide, él que es todopoderoso, es el Señor quien vive en el extremo del pueblo, en su castillo! Saint-Felix no es una "Bastide " sino un "Castelnau".
¡Un pueblo bajo alto amparo!
¡En St Felix nada malo pueda ocurrirles! Cuatro santos protegen al pueblo. El primero dio su nombre al pueblo: San Felix. Nativo de África, era obispo en Gerona, fue martirizado y arrastrado por caballos. Unas de sus reliquias estarán conservadas en la iglesia.
En 1390, una tormenta tremenda estalló en el Lauragais. La población se refugió en la Colegiata (consagrada por el Papa en 1318). Tras varios días esperando la calma, uno de los habitantes decidió salir al atrio de la iglesia con la estatua de Nuestra Señora la Bonita.... y se detuvo inmediatamente la tormenta. ¡La Virgen es, desde entonces, la segunda protectora del pueblo!
¡Nunca dos sin tres! Se necesitaba un tercero! Durante la guerra protestante, los hugonotes atacaron las murallas de Saint-Félix con más de 120 disparos de cañón, como si por milagro ninguno hubiera alcanzado su objetivo. Era el 14 de febrero de 1570, por lo que el día de San Valentín se convirtió en el protector del pueblo.
Entonces ¿por qué no uno más? En 1862, la población de St-Felix fue diezmada por el cólera. La alcaldía decidió ofrecer una Virgen de piedra para amparar a la población. Está puesta en el campanario, en pleno corazón del pueblo, y a sus pies un ex-voto con una inscripción en latín " soy quien ampara su ciudad".
El más bonito de los tesoros de St-Felix-Lauragais es gratuito y se puede disfrutar en cualquier momento del día. Tomen sus cámaras de foto o solo con sus ojos... podrán admirar la vista a 360o en la Tabla de Orientación.
01
Déjense mecer por el sonido del órgano
La Colegiata y su órgano del siglo XVIII.
Entren después de empujar la pesada puerta de madera y déjense encantar por la magia ...
02
¿Un salto en el pasado?
Descubrir la casa de Deodat de Severac
Pueden pasar a la casa donde vivió su infancia el artista, de repente se sumirán en un ambiente de principios del siglo XX!
03
Explorar las cercanías
El paseo goloso
Después de una agradable caminata por las Lomas de St-Felix, como recompensa, entren a la panadería para saborear unos pasteles, son riquísimos.
St-Felix, cuna de unos hombres históricos.
Guillaume de Nogaret, hombre de sangre
¿Por qué lleva la plaza del pueblo el nombre de Guillaume de Nogaret? Este personaje sombrío nació en las tierras del Señorío de St-Felix. Famoso jurista y brazo derecha del rey de Francia, Felipe le Bel, tiene reputación de no ser una persona comprensiva! Sin aludir a su papel en la tentativa de asesinato en contra del Papa Bonifacio VIII en Anagri, no se puede silenciar que se hizo cargo de organizar la persecución que sufrió la Orden del Temple. Fue él que inició los procesos por herejía contra los Templarios.
Deodat de Severac y la música romántica.
Siempre en la misma plaza, una casa grande llama la atención. ¿Oyen esta melodía suave? Se trata de la casa donde nació este famoso compositor de música romántica, Deodat de Severac, sus descendientes viven allí todavía. De niño, Deodat empieza la música con el organista de la Colegiata de St-Felix. Estudia después la música en Soreze y el derecho en Toulouse. Luego pasa 10 años en la Schola Cantorum de París. Se acerca a los artistas del Bateau Lavoir y al bullicio parisino., empieza a ser conocido pero añora su tierra y decide volver a vivir en su Suroeste.
El concilio cátaro: Mito o realidad?
El catarismo...esta contestación religiosa, nacida y desarrollada por los miembros de la misma iglesia se propaga rápidamente en el Suroeste de Francia en el siglo XI. El Catarismo preconiza una vuelta al mensaje de Cristo, sin el fasto y la opulencia que suelen existir en el seno de la Iglesia y del Papado. Los Cataros designados como "hombres de bien" o "parfaits", predican la palabra de Dios sin bienes materiales.
Este movimiento que se amplió rápidamente necesitaba jerarquizarse. Es porqué el Papa Niquintas de Constantinopla vino con sus tropas en Occitania para instaurar a Patriarcas Cataros durante un Concilio importante. Aquel Concilio hubiera tenido lugar en el castillo primitivo de St Felix. Los historiadores no encontraron ni huella de este evento... entonces ¿mito o realidad?
El órgano de St-Felix: una nota tras otra
La construcción del órgano remonta a los años 1780-81. Está inscrito en los Monumentos Históricos desde el año 1967. Primera restauración en 1930 .Los especialistas le añaden teclados, en consecuencia unas notas más en el órgano...y c consecuencia... Deodat de Severac podrá tocar allí sus composiciones románticas.La construction de l’orgue remonte aux années 1780-81.
En 1989, un "restaurador" de los Monumentos Históricos viene a pasar por St-Felix y descubre este notable órgano del siglo XVIII. Muchos órganos hoy han sido mecanizados y modernizados para facilitar el uso. El de St Felix tiene todavía sus grandes fuelles de piel de conejo, pegados con pegamento a base de hueso de peces. Aquel especialista de la restauración se quedó deslumbrado pero se dio cuenta, de inmediato, que el órgano había padecido transformaciones¡. Vaya idea añadirle unas notas! Hay que quitarlas . El órgano se va por segunda vez a los talleres de restauración entre 1990 y 1992, donde pierde su nota romántica pero recobra su aspecto de origen.