Al borde de un auténtico pueblo con servicios, la casa no tiene vecinos y se beneficia de una vista de las verdes colinas desde su terraza de 35m². Construida en madera por el propietario, es un alojamiento particularmente cálido. El interior de 64m² se compone de una amplia sala de estar con una cocina totalmente equipada detrás de su barra, un comedor y la sala de estar con una estufa de leña. En la parte de atrás, los dos dormitorios son cómodos y prácticos con sus camas dobles, sillones y mucho espacio de almacenamiento. El cuarto de baño con ducha italiana e inodoro separado completa la distribución. El sofá se abre como una cama doble o se puede proporcionar una cama individual extra para dormir hasta seis. Muy bien equipada: tiene todo lo necesario para pasar unas buenas vacaciones: wi-fi, gran televisor de pantalla plana con reproductor de DVD, selección de DVD, libros infantiles, juegos de mesa, ropa de casa con camas preparadas para su llegada, muebles de jardín, mesa de exterior con parasol, dos tumbonas, barbacoa y, sobre todo, ¡toda la tranquilidad! Elizabeth te dará la bienvenida y estará disponible durante su estancia. Nuestros huéspedes, muchas familias que vuelven cada año, nos dicen que todo es perfecto. ¡Estaremos encantados de recibiros en el Chalet!
